En mi opinión los deberes son importantes, pero no
estoy de acuerdo en una cantidad excesiva de los mismos. Mediante los deberes,
los niños aprenden a organizarse el tiempo y administrarse, al igual que
fomentan la responsabilidad de hacer sus trabajos de manera autónoma. También
considero que las tareas son una buena manera de que los niños y niñas
profundicen y refuercen los contenidos que han estado viendo en el aula, ya que
mediante la práctica las cosas se aprenden con más facilidad. Una excesiva dificultad en resolución de tareas también nos indica una laguna de conocimiento, y de esta manera, dicha laguna, una vez identificada se puede resolver con más facilidad.
Personalmente prefiero la tarea del niño, ya que por
lo menos utiliza herramientas novedosas, sus tareas no se resumen solo a copiar
los contenidos que ya están en un libro. La sociedad de hoy en día necesita
personas capaces de adaptarse a cualquier entorno, y mediante la realización de
tareas, podemos ponernos en contacto con cosas novedosas, y mediante la
resolución de dichas tareas, cada vez vamos a conocer más y de esta manera
vamos a adquirir nuevos métodos de resolución de tareas.
Mediante una entrevista, que es una tarea que la
profesora le da al chico, te da la oportunidad de ver el punto de vista de
otras personas, y de esta manera puedes llegar a reflexionar, y dar tu punto de
vista. Continuando con la tarea, mediante la publicación en el blog compartimos
nuestro trabajo con los demás, y así otras personas pueden leer tu trabajo y
aprender sobre lo que has escrito y también pueden dar su opinión.
Por otro lado, también pienso que una asignación de
tareas excesiva puede llegar a agotar, y que muchas veces, una alta cantidad de
tareas puede ser agobiante, cosa que puede derivar en cansancio y rechazo hacia
la escuela.